La pastelería nació hace 7 años, aunque David lleva entre los obradores del horno de sus padres en el barrio de Patraix desde que nació.
Así que entre la experiencia familiar y su formación como maestro pastelero, David abrió esta pastelería en el corazón de Cánovas donde se especializó en pasteles y chocolates, ganando varios premios nacionales (como el de Casa Chocovic en Barcelona) y del Gremio de Pasteleros de Valencia (Sant Dionís).
En enero de 2021 decidió crear una nueva especialidad, que fuera deliciosa y take away, y con un toque muy valenciano, las Maretes. Unos dulces en honor a las meriendas valencianas de la infancia, que han revolucionado la ciudad.